La reciente escalada deldólar blue y de las divisas financieras, sumado a la baja de la tasa monetaria que dispuso el BCRA a principios de este mes, y un escenario internacional menos benigno hicieron que diciembre sea el peor mes del año para la estrategia de carry trade. Se trata de la bicicleta financiera que consiste en vender dólares, invertir los pesos para aprovechar las tasas, y recomprar luego las divisas.
En ese sentido, un informe de la consultora 1816 destacó que «tras varios meses de apreciación del peso con volatilidad menguante» en diciembre los dólares financieros se despertaron y «llegaron a subir 10% en 4 días que es lo que rinden los pesos durante 4 meses».
La consultora indicó que «desde que asumió Milei, estar invertido en pesos a la tasa BADLAR (la de los plazos fijos superiores a $1 millón de 30 a 35 días)-rindió un impresionante 54% midiendo al CCL», pero remarcó que el 18 de diciembre se cerró «el primer periodo de 30 días en el que el carry dio negativo desde que comenzó la fase 2″ en julio» del programa económico.
El dólar blue cerró el jueves a $1.210, su máximo valor en dos meses, por lo que acumula en diciembre una suba de 8,03%, mientras que el CCL y el MEP registran en lo que va del mes una alza de 7,1% y 8,8% respectivamente. Así, todos los dólares paralelos superan el rendimiento de un plazo fijo tradicional que oscila, según el banco, entre 2,3% y 2,5%
¿Se agotó el carry trade?
Ian Colombo, Financial Advisor de Cocos Capital, comentó a iProfesional que «la suba del dólar sin dudas que desafía al carry trade, ya que licua la ganancia que se obtuvo en pesos».
«Sin embargo, no consideramos que el carry trade esté totalmente agotado. Para lo que viene, será clave evaluar las expectativas del mercado, respecto al precio del dólar. En las últimas semanas, se venía hablando de que el peso argentino estaba demasiado apreciado, o un dólar muy barato en términos relativos, por lo tanto, era de esperarse que se desarmen inversiones en pesos, y se busque cobertura en el dólar», alegó.
Juan Pedro Mazza, estratega senior de renta fija en Cohen S.A. evaluó que «en el corto plazo, el carry trade debería seguir generando retornos positivos en dólares, respaldado por la intervención del BCRA en el mercado cambiario«.
No obstante, el experto sostuvo que «la relación riesgo-retorno del carry trade es poco atractiva». Y estimó que «si la brecha se mantiene firme, una Lecap a 30 días ofrecerá un rendimiento mensual en dólares de 0,9%. Anualizado, este retorno equivale a TNA 11% anual; algo muy similar a lo que pagan los bonos del Tesoro y del BCRA».
Sin embargo, Mazza advirtió que «si la brecha aumenta en cinco puntos porcentuales al 17%, el retorno de esta inversión podría transformarse en una pérdida del 3,4%, lo que se traduce en un -34% anualizado». Y enfatizó: «esto quedó demostrado en diciembre, cuando cinco jornadas consecutivas de alzas en los dólares borraron las ganancias acumuladas durante varios meses».
Pablo Repetto, jefe de Research de Aurum Valores juzgó que «hoy con una brecha baja y una tasa de interés tan baja con un crawl de 2%, la estrategia de carry va perdiendo momento«. Y destacó que «los bonos en dólares ofrecen retornos más interesantes que apostar al carry».
De igual visión, el economista Federico Glustein afirmó que «está complicada la estrategia por la movilidad en las cotizaciones que no permiten prever una ganancia en corto plazo».
Por su parte, Nicolás Guaia, CEO de Max Capital Asset Management, planteó:«habría que dividir los dos tipos de carry trade», es decir, medido contra el dólar oficial, y contra los dólares financieros.
«El carry contra dólar oficial tiene lugar para seguir siendo una estrategia lógica para quienes pueden endeudarse a dollar linked (tomar deuda financiera en dólares y cancelar en 60 días, por ejemplo) y hacer tasa en pesos. Sin salida del cepo en vista para los próximos meses y con altas probabilidades de baja del ritmo de devaluación, esta estrategia puede seguir siendo redituable», aseguró.
A su vez, Guaia señaló que «el carry trade contra CCL o MEP se vio afectado en los últimos meses por la volatilidad de este tipo de cambio; siendo que las tasas en pesos están cada vez más bajas y el riesgo de mercado aparenta creciente, esta estrategia habría que tomarla con cautela».
Para Fernando Baer, economista jefe de Quantum Finanzas, «fue un mes donde se dejó parte del carry de los dos/tres meses previos, pero en un análisis anual, el balance fue muy bueno para los tenedores de pesos».
«No creo que se haya agotado. Veremos cómo reacciona el BCRA y que decide con la tasa, pero que hay margen, porque se mantiene la robustez fiscal y monetaria», fundamentó.
Gustavo Neffa,director de Research for Traders destacó que «obviamente los rendimientos ya no son los mismos en términos nominales, la curva de Lecaps arranca en 36 y terminan con los Boncaps en 31,5, con lo cual tenes otro rendimiento pero es extraordinariamente alto si tomas en cuenta que el tipo de cambio se va a mantener relativamente estable»
Al respecto,consideró: «que la brecha en el primer trimestre se va a mantener o amplicarse un poquito, a 10-15% no creo que llegue al 20%» por loque cree «que todavía sigue siendo un momento para hacer carry trade, por lo menos durante los próximos tres meses».
¿Cuándo podría resurgir con más fuerza el carry?
El analista financiero Gustavo Ber consideró que «más allá del resultado negativo que arrojan las tácticas de carry-trade durante diciembre, podría próximamente reanudarse un mayor apetito en la medida que el contexto externo se calme, en especial depreciación de monedas emergentes y debilidad de la soja, así como sigan las positivas señales desde la desinflación».
Los analistas de Delphos Investment resaltaron que «los incrementos en el MEP y en el CCL desde el inicio del mes, provocó que el carry tuviera su peor mes en el año» pero «esta misma suba también podría generar un mayor atractivo para la estrategia, dado el potencial de una apreciación de capital hacia adelante».
«El aumento reciente en el tipo de cambio mejora la relación riesgo-retorno de los bonos en pesos para inversores dispuestos a asumir mayor volatilidad cambiaria», afirmaron
Así, en Delphos esgrimen que «vemos la reciente ampliación de la brecha cambiaria como una oportunidad de posicionamiento en estrategias de carry trade»
Y proyectaron que «en un escenario optimista en el frente cambiario, con un crawling peg del 1% mensual a partir de febrero de 2025 y una brecha estabilizada en el 5%, la LECAP con vencimiento en junio de 2025 (S30J5) podría ofrecer un rendimiento del 18% en dólares».
Asimismo, Repetto sostuvo que «si la brecha se ampliara un poco más, fuera más alta puede llegar a ser interesante de vuelta el carry, pero en estos niveles luce demasiado ajustado todo y el perfil riesgo-retorno no lo justifica».
A su criterio, «brechas de 20% en adelante podrían ser atractivas» para retomar la maniobra del carry.
Pablo Lazzati CEO de Insider Finance, esgrimió que «por el momento no es una buena estrategia meterse en el carry trade, ya que no sabemos en cuánto estará el rango del dólar, aunque se estima entre $1.100 y $1.200, pero hasta que no pasen semanas que se fije ese nivel no se puede determinar la rentabilidad futura».
«Si se nivela el tipo de cambio en este rango y hay una baja de tasa, volveremos al carry trade, aunque no creemos que vaya a ser con los mismos volúmenes que se dieron en el 2024, sino un poco más bajo, porque la ganancia en dólares no será igual de atractiva», auguró.
A su vez, Glustein dijo «si hay baja del crawling podría haber algún incentivo al carry, pero depende más de los dólares paralelos que del oficial, debe haber estabilidad de los tipos de cambio libres».
Maximiliano Ramírez, socio de Lambda Consultores, manifestó que «si ves la suba que tuviste en términos de dólar financiero la última semana no te queda mucho margen para el carry, es el típico riesgo que vas a tener siempre con un tipo de cambio desdoblado» pero «si lo consideramos como un dato aislado, que el tipo de cambio subió, pero que no va a volver a pasar tenés todavía vida para el carry».
A su criterio, el repunte de los dólares financieros «estuvo muy atado por lo que pasó en Estados Unidos y Brasil, pero después, cuando se acomode un poco todo, esto debería estabilizarse».
En ese sentido, Ramírez prevé que, cuando eso ocurra, los dólares «se van a mantener estables entre $1.100 y $1.200 y que no haya grandes sobresaltos y quede algo de oxígeno como para seguir manteniendo el carry».
Sobre todo, dijo, si el BCRA baja el ritmo del crawling del 2% al 1% mensual: «eso te deja margen para seguir apostando y que el carry se siga manteniendo».
Qué títulos sugieren para carry
Mazza puntualizó que «para quienes quieran hacer carry, nos encontramos indiferentes hacerlo con tasa fija o con bonos CER; ya que nuestras expectativas de inflación se ajustan a los precios de mercado».
«También nos gustan las tasas reales cercanas al doble dígito que ofrecen los bonos CER del tramo largo como TZX28 (CER + 9%) o el DICP (CER +10%)».
Colombo también aseveró que «una vez que el dólar vuelva a encontrar equilibrio, probablemente sea buen momento para volver a armar inversiones en pesos, ya sea tasa fija, o tasa indexada a la inflación (CER)».
Eric Ritondale, economista jefe de PUENTE sostuvo que «si bien el contexto internacional no ayuda, seguir priorizando la desinflación a corto plazo exige mantener los dólares financieros estables, incluso mediante una mayor intervención en el mercado, algo que esperamos se intensifique de ser necesario»
«La posición técnica ayuda para sostener el trade en moneda local, en tanto las tenencias de los inversores internacionales en títulos de moneda local es muy liviana (la más baja desde 2015)», indicó
Para hacer carry, Ritondale precisó que «seguimos prefiriendo las Lecaps más largas, que esperamos capturen mejor la compresión adicional de rendimientos que esperamos una vez se anuncie la reducción del crawling peg, y los bonos CER con vencimiento en 2026, con rendimientos reales que creemos se ubican por encima de los niveles de equilibrio de largo plazo.
Ber juzgó que «los mejores vehículos en el actual contexto económico-financiero siguen siendo las Lecaps y Boncaps, y la ventana podría estar abierta durante el primer trimestre. Pero hizo hincapié en que «el «carry trade debería quedar reservado solo para aquellos perfiles más agresivos».