martes, abril 29, 2025

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La principal inquietud de los lobos de Wall Street sobre el plan económico de Javier Milei

La asamblea del FMI y el Banco Mundial, que se desarrolló en Washington entre el 21 y el 26 de abril, mostró a un equipo económico muy sólido y con muchas reuniones paralelas con CEOs y CFOs de bancos de inversión interesados en invertir en la Argentina.

En la mayoría de las reuniones, varios de los llamados «lobos de Wall Street» que se trasladaron a Washington la semana pasada centraron su mayor interés en las elecciones legislativas de medio término de octubre.

Inversores atentos a las elecciones legislativas

En la presentación que realizó Alejandro Catterberg, director de Poliarquía, en un evento organizado por J.P. Morgan en Washington -el mismo donde expusieron el secretario del Tesoro de EE.UU., Scott Bessent, y el ministro de Economía, Luis Caputo– el politólogo recibió numerosas preguntas relacionadas con el escenario posterior a las elecciones legislativas de octubre.

La mayoría se focalizó en el futuro de la provincia de Buenos Aires (PBA). Allí se habló de la posibilidad de una alianza entre el PRO y La Libertad Avanza (LLA) y de las últimas declaraciones del presidente Javier Milei, quien consideró muy factible una alianza entre libertarios y el PRO en PBA, a pesar de las fuertes críticas de Mauricio Macri.

La inquietud de muchos banqueros en esa reunión era si a Milei le podría pasar lo mismo que a Macri, quien luego de ganar las elecciones de medio término de 2017 -donde parecía que iba a quedarse ocho años- terminó perdiendo las elecciones de 2019, posibilitando el regreso del kirchnerismo.

Este recuerdo está todavía fresco en la memoria de los banqueros: fue hace apenas seis años y la caída de los activos argentinos generó millonarias pérdidas a bancos y fondos de inversión extranjeros, junto con una fuerte suba del dólar que obligó a los inversores a desarmar posiciones y llevarse sus dólares.

La respuesta del equipo económico en Washington frente a esas preguntas fue: «Esta vez, con Milei será diferente; nunca tuvimos una situación como la actual«, manifestaron por separado en distintas reuniones Caputo, el secretario de Finanzas, Pablo Quirno, y el titular del BCRA, Santiago Bausilli, quienes formaban parte del equipo económico de Macri en aquel entonces.

De todas formas, observan que hay muchas diferencias respecto de aquella época y destacan la firmeza de Milei para bajar el gasto público y la inflación, algo que no logró Macri.

Diferencias entre Javier Milei y Mauricio Macri que entusiasman a los mercados

A casi un año y medio de haber llegado al poder, Milei logró conseguir el acuerdo con el FMI para refinanciar el crédito por unos 52.000 millones de dólares que el organismo le había otorgado a Macri con el apoyo del entonces presidente Donald Trump. Ese acuerdo recién llegó en julio de 2018.

Otra de las diferencias que notan los banqueros de Wall Street es que en el primer mes de su mandato, Milei consiguió el superávit fiscal primario y financiero de las cuentas públicas, algo que Macri nunca logró durante su gestión.

Dado el gran interés que el mercado internacional tiene en relación con las inversiones, a los banqueros les parece razonable que el equipo económico apueste en los próximos meses a un claro objetivo: bajar aún más la inflación.

Creen en su mayoría que el esquema de flotación con bandas cambiarias va en esa dirección. «Se puso un piso bastante bajo y la decisión oficial es que el BCRA no intervenga hasta que la cotización del dólar caiga hasta los 1.000 pesos. Me parece una buena idea, pero no se tienen que pasar de la raya», comentó a iProfesional uno de los financistas argentinos que asistió a la reunión y vive en Nueva York.

La mayoría de los banqueros de Wall Street sostiene que una mayor caída del tipo de cambio es importante para retomar el proceso de desinflación en los próximos meses, y lo consideran un factor clave para que Milei logre un resultado electoral contundente.

Por el momento, muchos consideran que es difícil que los bonos argentinos tengan un fuerte rally alcista en la previa electoral, pero creen que si el triunfo del oficialismo es contundente, desde fin de año habrá un gran ingreso de capitales, especialmente de largo plazo.

Por ahora son pocos los que se arriesgarían a tomar riesgo argentino sin mayores certezas políticas. La derrota de Macri en las PASO a manos de Alberto Fernández provocó un derrumbe récord en los precios de los activos, que costó más de cinco años remontar o al menos recuperar parte del terreno, algo que no olvidan muchos dueños de fondos de inversión como Blackrock y Templeton.

El peligro de un regreso a políticas populistas tendría un impacto enorme sobre los activos argentinos, tanto o más que lo ocurrido en 2019. Por eso, la mayoría prefiere la cautela mientras no haya certezas sobre el resultado de las políticas que lleva adelante Milei.

La estrategia de carry trade y el nuevo escenario cambiario

Desde que el gobierno de Javier Milei eliminó el cepo cambiario el 14 de abril de 2025, la estrategia de carry trade arrojó ganancias cercanas al 12% en dólares según estimaciones privadas. Esto refleja las diferencias entre las tasas de interés locales y el comportamiento del tipo de cambio en un contexto de alta volatilidad cambiaria.

Sin embargo, los expertos coinciden en que las fluctuaciones del dólar y la incertidumbre económica presentan riesgos que los inversores deben tener en cuenta antes de asumir esta estrategia de inversión, que está lejos de ser segura, dado que el esquema de tipo de cambio flotante no garantiza una ganancia permanente.

Esta medida forma parte de un acuerdo con el FMI, cuyo objetivo es acumular reservas internacionales y estabilizar el mercado cambiario.

El BCRA ha advertido que no intervendrá hasta que el tipo de cambio toque el piso establecido, lo que genera un escenario incierto para los inversores, quienes deben decidir si apuestan por estrategias de carry trade en pesos o si se protegen ante posibles movimientos bruscos del tipo de cambio.

El carry trade es una estrategia de inversión que involucra la compra de activos en una moneda con tasas de interés más altas (en este caso, en pesos) y la venta de activos en una moneda con tasas más bajas.

«En Argentina, esta estrategia que supo ser moneda corriente mientras reinaba el crawling peg se reactivó con el uso de instrumentos en pesos como Lecap y Boncap, que ofrecen tasas de interés más altas que las expectativas de avance del dólar. Pero con este modelo de Milei no será lo mismo», explicó otro de los banqueros que asistió a la reunión de J.P. Morgan.

En ese mismo seminario, el secretario del Tesoro de EE.UU., Scott Bessent, aseguró que la Casa Blanca podría otorgarle al gobierno argentino una línea directa de crédito en caso de un shock internacional.

«Si Argentina lo necesita, en caso de un shock externo y si Milei mantiene el rumbo, estaríamos dispuestos a utilizar el FSE», dijo Bessent en referencia al Fondo de Estabilización Cambiaria del Tesoro estadounidense.

Los analistas de J.P. Morgan destacaron que «la nueva estabilidad cambiaria permite que el carry trade sea una estrategia viable, al menos en el corto plazo».

Según el banco de inversión, la recomendación es apostar por instrumentos de corto plazo como las Lecap con vencimiento en agosto de 2025, que ofrecen rendimientos de hasta 40,5% en pesos. Para J.P. Morgan, los rendimientos de los instrumentos en pesos son atractivos debido a las altas tasas de interés locales, que superan ampliamente a los bonos en dólares.

Aval internacional y apoyo al rumbo económico

Los integrantes del equipo económico se mostraron sorprendidos por la cantidad de consultas que recibieron de otros ministros de Finanzas y presidentes de bancos centrales.

Caputo se reunió con varios funcionarios europeos para exponer sobre el plan de ajuste y el consiguiente rebote económico, tal como anticipan el FMI y el Banco Mundial con un pronóstico de crecimiento de 5,5% para este año, más del doble del promedio regional.

También hubo muchas consultas sobre el futuro del dólar, las bandas de flotación, la llegada de inversiones y el posible impacto de las turbulencias externas a raíz de la guerra arancelaria entre Estados Unidos y China, uno de los ejes centrales de la asamblea.

En Washington, por primera vez en siete años, se volvió a notar entusiasmo por los avances de Argentina, que fueron elogiados por la directora gerente del FMI, Kristalina Georgieva, en su presentación. Sin embargo, algunos inversores que escucharon a Caputo, Bausilli y Quirno en distintas reuniones se mostraron cautelosos.

No sorprendió al equipo económico el fuerte respaldo que Georgieva le dio al gobierno, incluso de cara a las elecciones legislativas de octubre. «Es importante que no se descarrile la voluntad de cambio. No vemos riesgo de que eso ocurra, pero urgimos a la Argentina a mantener el rumbo económico en octubre», señaló el jueves Georgieva.

Un día después, tuvo que aclarar sus dichos al afirmar que solo era un mensaje para la administración de Javier Milei, y no para los argentinos.

Posteriormente, en una presentación abierta para la prensa sobre el hemisferio occidental, Rodrigo Valdés, director para esa región del FMI, respaldó la aclaración de Georgieva. «La directora general dijo algo muy simple: que las elecciones son para el pueblo, no para nosotros. También subrayó la importancia de la continuidad política para apoyar la estabilidad y la recuperación de Argentina», añadió Valdés.

«Sus comentarios reflejan las oportunidades económicas que tenemos por delante y la importancia de que el gobierno permanezca en el camino correcto», señaló Valdés.

La anécdota de Federico Sturzenegger y el símbolo de la motosierra

Fue sorpresivo y muy grato para muchos banqueros de Wall Street que funcionarios argentinos participaran activamente de los seminarios y paneles de la asamblea, que reunió a ministros de Finanzas y Economía, autoridades de bancos centrales y ejecutivos de todo el mundo. «Esto no se veía desde los tiempos de Macri», fue el comentario de la mayoría de los asistentes.

El secretario de Finanzas, Pablo Quirno, participó el martes en un panel del G-24, donde sostuvo que la Argentina intenta «recuperar la credibilidad». Allí también se comentó la posibilidad de que el país mejore su calificación de mercado de frontera a mercado emergente en el índice que elabora MSCI, una categoría que perdió en junio de 2021 bajo el gobierno de Alberto Fernández.

El miércoles, el titular del BCRA, Santiago Bausilli, mantuvo un diálogo a sala llena con Rodrigo Valdés, quien fuera apartado de la negociación con Argentina a pedido de Milei.

Sin embargo, quien más sorprendió fue el ministro de Desregulación y Transformación del Estado, Federico Sturzenegger. Al finalizar el panel que compartió con Georgieva, consultó a la moderadora: «¿Puedo salirme del protocolo?». Luego, le obsequió un pin de una motosierra, símbolo característico de la campaña de Milei, provocando risas y aplausos entre los asistentes.

Entre risas, Georgieva -con ayuda de Sturzenegger- se colocó el pin en la solapa de su saco verde, posó para fotos y videos, y a la salida, el ministro accedió a sacarse varias selfies con la directora del FMI.