El presidente Javier Milei instaló en el discurso oficialista el desapego por ofrecer cifras económicas y proyecciones con sustento: recientemente sostuvo ante un medio italiano que bajó la inflación del 52,4 por ciento mensual al 1,2 por ciento. Pero ahora, la ministra de Capital Humano, Sandra Pettovello, prometió hacer oficiales esas cifras para diferenciarse de las estadísticas que publica el INDEC, en particular, en la medición de pobreza. Un primer informe elaborado por la cartera de Pettovello proyecta que, en el tercer trimestre, la pobreza bajó hasta un 38,9 por ciento.
En el brindis de fin de año con la prensa acreditada en Casa Rosada, Pettovello anticipó que su cartera está trabajando con el Consejo Nacional de Coordinación de Políticas Sociales (CNCPS) para medir la pobreza, pero no por ingresos. «Estamos haciendo un Índice de Capital Humano», lo presentó la ministra, aunque no supo especificar cuáles son las variables que utilizará.
«No podemos cambiar el índice del Indec, lo va a seguir midiendo a su manera cada seis meses. Este va a ser el Índice de Capital Humano y lo queremos tener listo lo antes posible, pero no sabemos en qué mes va a ser”, anticipó Pettovello con las misma rigurosidad con la que Milei lanza sus proyecciones económicas.
La carrera de la ministra de Capital Humano por lanzar su propia medición de pobreza puede estar relacionada con que en marzo del próximo año, el Indec publicará la cifra de pobreza del segundo semestre de 2024. El número del primer semestre, publicado en septiembre, fue la peor cifra que enfrentó la gestión de Milei y mostró la crudeza del modelo económico: la pobreza alcanzó al 52,9 por ciento de los hogares; contra un 40,1 por ciento en el mismo periodo de 2023. Mientras que la indigencia llegó al 18,1 por ciento; cuando en el primer semestre del año pasado era de 9,3 por ciento.
La medición del INDEC compara la canasta básica de pobreza e indigencia, que elabora mes a mes, con la evolución de los ingresos de la población para estimar la situación en la que vive cada familia. Según a medición que hace el Observatorio de la Deuda Social Argentina de la Universidad Católica Argentina (UCA), el nivel de pobreza en el último trimestre del año alcanzó al 49,9 por ciento de la población; mientras que entre los niños y niñas, la cifra se elevaba al 65,5 por ciento.
El Ministerio de Capital Humano publicó un informe la semana pasada con números diametralmente opuestos. La fuente, el mismo organismo con el que se prepara el «Índice Capital Humano», el Consejo Nacional de Coordinación de Políticas Sociales (CNCPS). Los motivos: «la implementación de políticas económicas que han contribuido a reducir la inflación y estabilizar la economía», además de la ponderación de los aumentos registrados en la Asignación Universal por Hijo (AUH).
Según ese informe del CNCPS, la pobreza se había reducido del 54,8 por ciento en el primer trimestre del año, al 51 por ciento en el segundo y, estimaba una proyección del 38,9 por ciento para el tercer trimestre. En cuanto a la indigencia, el CNCPS la proyectaba en un 8,6 por ciento para el tercer trimestre del año. «Vamos a seguir mejorando la economía, en todo lo que tiene que ver con terminar con el analfabetismo y que las personas coman en las mesas familiares y no en comedores», celebró Pettovello en el brindis de fin de año; tras cortar la entrega de alimentos durante todo el año.
Una tensión que crece entre la Casa Rosada y el INDEC
El anuncio hecho por Pettovello se puede enmarcar en la tensa relación que la Casa Rosada y el Ministerio de Economía mantienen, desde septiembre, con el titular del INDEC, Marco Lavagna. Como viene contando PáginaI12, el organismo de estadísticas oficiales ya tiene terminado desde octubre un nuevo Índice de Precios al Consumidor (IPC), que modifica la ponderación de los indicadores de cada rubro para acercar la medición de los precios, a la baja, con salarios que no llegan a fin de mes.
El nuevo IPC, entre otros puntos actualizó los consumos familiares y le da un peso más importante en el indicador a los servicios y tarifas, lo que más aumentó en la era Milei. Lavagna había anunciado la publicación bajo la nueva modalidad en noviembre, pero desde Casa Rosada lo frenaron. Fuentes cercanas al Fondo Monetario Internacional (FMI) admitieron que el organismo le expresó al Gobierno que el cálculo actual no es representativo y debe corregirse.
Lavagna viene advirtiendo la necesidad de aplicar el nuevo modelo de medición del IPC desde septiembre, cuando hizo pública su opinión a través de las redes sociales. «Vemos a diario como las creencias personales a menudo pueden tener más peso que los hechos objetivos. Esto puede llevar a la difusión de información errónea, lo que puede distorsionar la percepción pública y socavar la confianza en las instituciones», señaló el titular del INDEC sobre la distancia entre la suba de precios, en particular las tarifas reguladas, y la cifra general de inflación.
En la actualidad, el IPC pondera en más de 20 puntos el rubro «Alimentos y bebidas no alcohólicas», mientras que otorga sólo un 8,5 puntos a los servicios.»Las estadísticas son una herramienta poderosa que nos mantiene anclados en la realidad. Nos permiten ver más allá de nuestras percepciones individuales y comprender el mundo de manera más completa y precisa. Sin ellas, corremos el riesgo de alejarnos de la verdad», advirtió Lavagna.